El aprendizaje por proyectos ‐ Manual training and Industrial Arts
La filosofía de
Robinson tenía un claro inconveniente, restringía el tiempo de sus alumnos para
estudiar e investigar. Esta formación práctica y manual se trasladó de la
universidad a los institutos, y en 1879 C.M. Woodward fundó la primera Manual Training School en San Luis con
clara influencia rusa.
En esta escuela, el
aprendizaje constaba de dos fases. En un primer periodo, los alumnos aprendían
los conceptos básicos de las técnicas y los instrumentos para después, al
terminar cada unidad y principalmente al acabar el año académico, los alumnos
pudieran llevar a cabo diversos proyectos. La formación estaba diseñada para
progresar sistemáticamente desde los principios elementales hasta la aplicación
práctica o, en palabras de Woodward, para ir desde la “instrucción” a la
“construcción”.Este enfoque pedagógico tuvo gran apoyo en todo el país y una
década después de la fundación de la Manual Training School, miles de jóvenes
recibían formación de carpintería, costura, cocina en todo el país.
John Dewey y
el pragmatismo en la educación americana.
El éxito de Woodward
se trasladó incluso a la escuela primaria y es en este punto donde su método
empieza a ser criticado duramente. Comienza una reforma que critica que el
trabajo y el estudio sean el motor principal de la formación manual. Según esta
nueva corriente, la formación manual debe basarse en los intereses y
experiencias del niño porque la creatividad es tan importante como la formación
técnica del niño. El máximo exponente de este movimiento de reforma fue John Dewey,
filósofo y líder del pragmatismo en la educación americana.
John Dewey
(1859-1952), considerado por muchos el padre de los proyectos de investigación,
insiste en la importancia de la acción y de la experiencia como motor de aprendizaje,
y de la reflexión como uno de sus componentes indispensables. Afirma que el
proceso de conocimiento siempre gira alrededor de un tema que afecta a la
persona, de una inquietud que le preocupa y, por lo tanto, el pensamiento
siempre tiene su origen en una situación problemática que es necesario resolver
mediante el esfuerzo del aprendizaje. Un proceso de conocimiento que, según el
autor, es el mismo que el proceso de investigación científica y que se debe poder
aplicar a la escuela, favoreciendo la participación del alumno en la
construcción de propuestas que dirijan sus aprendizajes. Su propuesta
metodológica, juntamente con la visión pragmática del proceso de investigación
y la vinculación entre experiencia y aprendizaje, serán elementos que otros
autores retomarán más adelante.
Su filosofía fue
adoptada rápidamente por Charles R. Richards, que en 1900 decidió llevar a
cabo el aprendizaje del ámbito natural y social a través de un proyecto sobre
la cultura India. En primer lugar, los alumnos leyeron el poema de Longfellow
“Hiawatha”, discutieron las costumbres y rituales de los indígenas y visitaron
el Museo de Historia Natural. Después, construyeron tiendas, confeccionaron
disfraces y tallaron flechas y arcos con el fin de vivir como lo hacían los
indígenas durante un día. Los alumnos adquirieron el conocimiento y las
destrezas necesarias para llevar a cabo el proyecto, de este modo, se diría que
la “instrucción” no precedió el proyecto (como defendía Woodward) sino que
estaba integrada en la “construcción” del mismo.